lunes, 23 de diciembre de 2013

¿Alguien quiere un poco de espíritu navideño?

¡Preparémonos para estos días que llegan! Para ser felices a la fuerza, para comer sin hambre, para ponernos enfermos adrede.
Sonriamos con envidia mientras los nuevos ricos descorchan botellas de champán en la televisión…finjamos que decimos en serio eso de: “que tengamos salud…”, ¡por favor…no te lo crees ni tú!
Mentalicémonos para escuchar por doquier un repertorio musical que se mantiene intacto a través de los años.
Una y otra vez…sin cesar…en el súper, por la calle, en la radio, en el bar…ande, ande, ande, la marimorena, los peces en el río, y fun, fun, fun…
Olvídate de excusas para escaquearte de las reuniones familiares, ¡Hay que estar…!
Sonríe al cuñado impertinente, abraza a la suegra metomentodo… ¡Bésalos a todos!
Compras, compras, compras…y después devuelves, devuelves, devuelves…largas colas de artilugios inútiles que retornan a su hogar, comprados sin orden ni concierto en una fiebre de tarjetas de crédito, paquetes de colores y brillantes lazos…
Y por favor no olvides dejar el balcón abierto para que un desconocido oculto tras una espesa barba se cuele impunemente en tu casa y se coma las galletas y la leche que merecerías tomar tú… y encima se lleve el mérito…
¡Pero no cierres aún…que faltan otros tres…y estos traen camellos…!


Entiéndase como broma esta sátira, y ¡¡FELIZ NAVIDAD!!

Amarte

Amarte no es lo más fácil que he hecho en mi vida…sobre todo porque te amé sin saber amar…
Sabía jugar, y cantar, y reír…pero no sabía amar…
Ni tú tampoco sabías…
Después no he querido aprender…

Si no es contigo no quiero saber…

Naturalmente

El día puede nacer de la bruma…de la oscuridad de una noche invernal puede surgir la mañana…
Como el sol viene a morir inevitablemente en la negrura…
Entre los ecos de las montañas se escucha el silencio…y bajo el abrigo del olvido duermen los recuerdos…aletargados por el frío del tiempo…amenazadores como volcanes…
Si en una lágrima se condensa el dolor de una vida…si en un mal paso se rompe un largo camino…si una sola grieta puede conducirte al abismo…
¿A qué te aferras?
Si todo es apariencia…si naces solo…si nadie está escuchando…
¿En quién te apoyas? ¿A quién sirves tú de apoyo?
Si repites de nuevo el tropiezo…pues olvidas el golpe de la piedra en los pies…
¿De dónde aprendes?
Si esperas siempre tras la misma puerta…
¿Qué sorpresa esperas?
Si compras el mismo billete cada vez…siempre cogerás el mismo tren…

Jamás el día nació de otro lugar que no fuera la noche…

sábado, 21 de diciembre de 2013

Los días

Parecidos pudieran parecer los días entre sí...
Levantarme, trabajar, dormir...
Y entre medias, comer...
Ni siquiera siempre hablar...
Pero esta similitud no es más que apariencia en realidad...
Pues cada día trajo consigo algo esencial...
Algo especial que lo diferenció de los demás...
Una palabra, una mirada, una llamada quizá…
Una persona inesperada…
Una película…
Un saludo…
Una sonrisa…

Una carta en el buzón…una enseñanza…
Una puerta a la esperanza...

sábado, 7 de diciembre de 2013

Difícil de explicar

Y tan suavemente como una hoja de otoño se deja caer al suelo 
me abandoné yo en los brazos de mi nuevo ser…
Y sucedió que entonces dejé de ser yo…
Dejé de resistirme, de apretar los dientes, de temer…
Dejé de enfadarme y de temblar…
Dejé muy a menudo de hablar…
Me torné ligera y transparente…
Inmaterial...
Tanto, que todo lo que llegaba a mí, continuaba más allá de mí…
Nada dejaba huella ya…
Ningún dolor que rumiar durante horas…ningún rencor que guardar…
Esencialmente ausente...absolutamente presente...

Difícil de explicar…imposible de entender...
Increíble de sentir...


martes, 3 de diciembre de 2013

Ahora

A través de los párpados percibo vagos colores, ligeros movimientos de siluetas irreconocibles…sin embargo no deseo descubrir su secreto…
No siento la necesidad de poner nombre a las formas que desfilan ante mí…
Me encuentro bien en mi interior y en mi silencio…
Observo mi calma y me basta…
Jamás estuvieron tan abiertos mis ojos como ahora que permanecen cerrados…
Jamás me elevé tan alto como en este instante en que percibo la tierra bajo mis pies descalzos…
Nunca pensé que la vida pudiera fluir así...

Sería tan innecesaria cualquier palabra que pudiera pronunciar…estaría tan vacía…